A pesar de que la laparoscopia es una técnica de cirugía bastante popularizada en la actualidad, todavía hay muchos pacientes que por desconocimiento no han experimentado las grandes ventajas de este tipo de intervención.
En días anteriores hablábamos de la historia de la laparoscopia y de cómo llegó hasta la actualidad convirtiéndose en uno de los métodos de cirugía más populares.
Su principal beneficio era el hecho de su precisión en las incisiones. Su pequeño tamaño permitía una reducción en el tiempo y en especial, del dolor post operatorio.
De este modo, la recuperación tras una operación que hace años implicaba largos periodos y esperas, se agiliza notablemente en su proceso mejorando la calidad de vida del paciente.
Así mismo, otro de los problemas secundarios que ocurría cuando era necesaria una operación, eran las complicaciones derivadas en heridas del tipo infección, hernia o eventración. La probabilidad de que esto ocurra con la laparoscopia se reduce notablemente hasta probabilidades muy bajas.
Y es que, la ventaja de la cirugía por laparoscopia consiste en minimizar el daño que vamos a causar al paciente para que éste sea el más reducido posible y de esa forma, que se incorpore lo antes posible a su vida cotidiana.
Los largos períodos de ingreso hospitalario quedaron atrás con las posibilidades de la laparoscopia. La tecnología al servicio de la salud de los pacientes.